El Interim Manager y el “recelo” de los ejecutivos
Vocero: José Torres-Llosa, socio Amrop a cargo de Interim Management
Habiéndose cumplido un año desde que se declaró oficialmente al Perú en pandemia, vemos que además de la pérdida lamentable de la vida de miles de peruanos, las empresas -sin importar el tamaño- se encuentran ante un panorama que, dependiendo del giro de su negocio, se habrá visto impactado económica y/o financieramente de modo negativo.
Es así como -probablemente- se hayan visto en la necesidad de adoptar y adaptar algunos, o muchos, de sus modelos de negocio para poder sobrevivir. No me refiero únicamente al trabajo remoto o a la incursión en el comercio electrónico de un día para otro.
Actualmente, es probable que muchas compañías tengan claro qué deberían hacer para enfrentar los retos que se vienen este 2021. Este es el punto en el que, como firma, conviene analizar si el equipo con el que contamos posee los recursos necesarios para salir adelante.
Uno de los más importantes es el talento ejecutivo. Es normal que, como producto de la situación vivida durante el último año, los equipos y colaboradores hayan incursionado o profundizado en áreas donde antes no tenían cabida. Por ejemplo, la reestructuración de operaciones, la apertura o el cierre de líneas de negocio, los nuevos canales de distribución, la infraestructura y los servicios tecnológicos, etc.
Es en estas circunstancias que el apoyo de un Interim Manager puede hacer la diferencia. Entonces, ¿por qué no son figuras utilizadas en Perú, como sí en otros países?
En muchos casos la respuesta es el temor o el recelo que el equipo ejecutivo pudiera sentir por la presencia de un Interim Manager dentro de la empresa. La mejor manera de neutralizar estos sentimientos es el comunicar clara y oportunamente el porqué de la presencia de dicha persona como parte del equipo gerencial. Si todos conocen el objetivo a cumplir, o la situación a resolver, por parte del Interim Manager, el tiempo que estará en la empresa, y cómo su participación beneficiará a la organización en general; no debería haber temor alguno.
Por otro lado, los Interim Managers cuentan no solamente con las habilidades y experiencia necesarias para realizar su tarea, sino que, además, poseen la empatía y las habilidades “soft” necesarias para desempeñarse con éxito, debido a que de ello depende su reputación y empleabilidad en el futuro.
Siendo así, aquellas empresas que estén necesitando de algún apoyo ejecutivo que por el momento no tuvieran disponible, anímense a probar los servicios de un Interim Manager, una opción comprobada por su eficiente y rentabilidad.
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